El Café de la Plaza de Casserres fue fundado en 1932 por los abuelos Juan y Rufina, por eso a día de hoy aún es conocido como Ca la Rufina. De abuelos a padres y de padres a hijos, el café pasó por segunda generación a la madre Montserrat y actualmente a Joan y Laura que, con la apertura del restaurante en noviembre de 2009, han abierto una nueva etapa.Perfecto para una cena informal con amigos o familiares, cuenta con una gran variedad de tapas, raciones, platos combinados y bocadillos delicios